Por Julio Perelló/ Opinión ./
Unificar al Partido Revolucionario Dominicano no es obra de personas conflictivas, ni mucho menos que se maneje con altanerías, ni arrogancias, entre otras cosas.
Manejar al PRD en su militancia es tener las riendas de un auténtico liderazgo, que extralimite, incluso, su sentido práctico de ser humano. Y ahí el está el caso del doctor Guillermo Moringlane.
Ël tiene la capacidad política para manejarse en la construcción de un partido cazador de vanguardias. Va sobre las causas y logra sus efectos.
Moringlane ha demostrado que es perredeísta auténtico y no cómo algunos que han vivido de salto en salto.Fue disciplinado cuando se vio precisado a dejar sus aspiraciones como candidato a diputado y se integró por completo a la campaña electoral.
Su labor social, su solidaridad de pueblo, están enquistadas en las mentes de tanta gente que le servido sin nada a cambio. Solo por resolver el problema..
Moringlane, entiendo, debe ser el presidente provincial del Partido Revolucionario Dominicano de La Romana.
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